Mateo 11:28 y 30
28 Venid a mí todos los que estáis trabajados y cargados, y yo os haré descansar. y 30 porque mi yugo es fácil, y ligera mi carga. Mateo 11:28 y 30
El conocimiento de la Verdad trae una carga o una bendición a nuestras vidas. La verdad que se aplica trae bendición. La verdad que no se aplica nos agobia.
En el versículo de hoy, Jesús anima a todos los que trabajan bajo una carga pesada a venir a Él para descansar; Él promete que Su yugo es fácil y Su carga es ligera. En este versículo, la palabra griega zygόs se usa para denotar un yugo o una balanza. Para que cualquiera de ellos funcione correctamente, deben estar equilibrados.
Cuando un labrador pone un yugo sobre una yunta de bueyes, les está diciendo que hay campos para arar. Cuando cargamos con el yugo de Jesús, entendemos que tenemos trabajo que realizar. No se trata de si vamos a trabajar; es una cuestión de para quién trabajamos.
No escapamos a un yugo. El que está a cargo pone el yugo sobre nuestros cuellos. Para aquellos que viven fuera de Cristo, el gobernante de este mundo, Satanás, pone un yugo sobre sus cuellos. Para aquellos que se someten a Jesús, Él se convierte en nuestro Maestro y Señor.
¿De quién es el yugo que llevas? El yugo de Satanás es de carga y esclavitud. El yugo de Jesús es ligero y fácil y lleno de bendición.
Bendición de hoy
Que el Señor te bendiga y te guarde. Que el Señor haga resplandecer Su rostro sobre vosotros y tenga de vosotros misericordia y os conceda Su paz. Entregad todas vuestras cargas al Señor, y Él llevará la carga. Él se preocupa por ti.
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