1 Corintios 15:20

²⁰ Mas ahora Cristo ha resucitado de los muertos; primicias de los que durmieron es hecho. 1 Corintios 15:20

Leí acerca de una persona que escribió lo siguiente a un columnista de consejos de un periódico local: Querido Uticus: Nuestro predicador dijo en la Pascua que Jesús simplemente se desmayó en la cruz y que sus discípulos lo cuidaron hasta que recuperó la salud.  ¿Qué piensas? 

Atentamente, desconcertado.  El columnista respondió, Querido Desconcertado, Golpee a su predicador con un gato de nueve colas con 39 fuertes golpes, clávelo a una cruz, cuélguelo al sol durante seis horas, pásele una lanza por el corazón, embalsámelo, póngalo en un tumba sin aire durante 36 horas, y ver qué pasa.  Atentamente, Uticus.

¿Qué distingue a la fe cristiana de todas las demás creencias y sistemas religiosos de este mundo? 

Podría reducirse a esto: si vas a las tumbas de cualquiera de los profetas sobre los cuales se han fundado las religiones del mundo, las encontrarás ocupadas.  Pero si vas a la tumba de Jesucristo, la encontrarás vacía, porque Él está vivo.  Servimos a un Salvador viviente.

Esta es la razón por la que la resurrección de Jesús es un mensaje tan importante y también por la que ha recibido tanta oposición a lo largo de la historia.  El diablo sabe que la Resurrección anuncia su derrota.  Él también sabe que si crees en esta gran verdad de que Jesús murió en la cruz por tus pecados y resucitó de entre los muertos, puede cambiar tu vida.

No solo puede cambiar tu vida, sino que poner tu fe en Él también significa que algún día tendrás un cuerpo nuevo y resucitado.  Como creyentes, tenemos esta gran esperanza de que nosotros también viviremos de nuevo.