Deuteronomio 28:2

Y vendrán sobre ti todas estas bendiciones, y te alcanzarán, si oyeres la voz de Jehová tu Dios. Deuteronomio 28:2
Génesis 3:1
Juan 15:7
Un fiel reflejo de su Padre. Juan 12:45
Salmos 34:7
1 Corintios 1:21
Éxodo 16:35

El Señor enumeró las bendiciones que alcanzarían a los hijos de Israel si tan solo obedecieran Sus mandamientos. Todo lo que Él prometió a Su pueblo escogido ahora nos ha llegado a través de la Cruz de Cristo.
La palabra “superar” significa inundar nuestras vidas, como un maremoto que barre el castillo de arena de un niño. ¡Seremos indefensos ante el abrumador derramamiento de Sus bendiciones!
Deuteronomio 28 explica las muchas bendiciones que Él promete. Seremos bendecidos en la ciudad y el país. Dondequiera que vayamos, Él derramará Su favor.
Seremos bendecidos en el fruto de nuestro cuerpo: nuestros hijos que son regalos del Señor. Seremos bendecidos en nuestra canasta y tienda; tendremos más que suficiente en nuestras finanzas. Prestaremos a otros, pero no tenemos necesidad de pedir prestado a nosotros mismos. Si los enemigos vienen contra nosotros desde una dirección, huirán en siete direcciones, ¡esparcidos como paja en el viento!
Cualquier cosa a la que pongamos nuestra mano, Él la bendecirá. Ya seamos vendedores o científicos, Dios prosperará el trabajo que hagamos. Seremos la cabeza y no la cola, ¡siempre saldremos adelante! Otros verán que pertenecemos al Señor y se asombrarán de nuestro generoso Padre.
Bendición de hoy
Que el Señor te bendiga y te guarde. Que el Señor haga resplandecer Su rostro sobre vosotros y tenga de vosotros misericordia y os conceda Su paz. Con plena confianza en el Dios que prometió, pronuncia esta verdad sobre tu vida: ¡Yo nací para ser bendecido!

Deja una respuesta