Juan 8:31-32
Dijo entonces Jesús a los judíos que habían creído en él: Si vosotros permaneciereis en mi palabra, seréis verdaderamente mis discípulos; 32 y conoceréis la verdad, y la verdad os hará libres. Juan 8:31-32
Podemos ignorar la Verdad, debatir la Verdad, argumentar la Verdad y negarnos a aplicar la Verdad. Sin embargo, no importa lo que hagamos con ella, la Verdad no cambia.
Muchas personas están discutiendo los problemas nacionales que deben abordarse. Los políticos exponen desde sus diversas plataformas. Los comentaristas presentan sus puntos de vista sobre las noticias de la noche. En conversaciones casuales entre amigos, los temas se diseccionan y discuten.
Debatimos quién debe ser votado o destituido. Discutimos quién merece ser desfinanciado, quién necesita ser reembolsado y quién está sobrefinanciado.
En medio del ruidoso clamor, hemos pasado por alto esta verdad central: estamos cortando ramas en lugar de golpear la raíz. Hasta que nos demos cuenta de que somos una nación que necesita la Verdad de Dios, el caos y la confusión seguirán empeorando.
Los hijos de Dios reconocerán la Verdad, y nos hará libres. Una vez que la descubrimos, ¿qué hacemos con la Verdad que conocemos? No podemos diluirlo o ignorarlo. Debemos someternos a ella y hablarla.
Nuestras bendiciones no provienen de un partido político, un programa económico inteligente o un líder carismático. Nuestras bendiciones fluyen del Padre de lo alto. Cuando Estados Unidos recuerde, volveremos a nuestro legado como una nación bajo Dios.
Mateo 24:13
Romanos 8:26
Números 6:24-26
Arrebatamiento: ¿Será la iglesia arrebatada?
Hechos 28:26-27
Exodo 14:31
Bendición de hoy
Que el Señor te bendiga y te guarde. Que el Señor haga resplandecer Su rostro sobre vosotros y tenga de vosotros misericordia y os conceda Su paz. ¡Sirve al Señor con todo tu corazón, alma, mente y fuerzas, porque lo mejor está por venir!
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